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Perspectivas para la Minería en 2024: Navegando entre Oportunidades y Desafíos
- Por Juan Carlos Guajardo, Director Ejecutivo Plusmining.
La minería, un pilar fundamental de la economía global, enfrenta en 2024 un entorno mixto de oportunidades y desafíos. Estos se originan en diversos factores como la evolución de la demanda, políticas públicas y riesgos relacionados con el medio ambiente, la sociedad y la gobernanza (ESG). Impulsada por la transición energética, la electrificación de la economía y el crecimiento de la clase media en mercados emergentes, la demanda de materias primas mineras, especialmente cobre, litio y otros metales esenciales para las energías renovables y la movilidad eléctrica, sigue en aumento. Sin embargo, esta tendencia se ve amenazada por la inestabilidad geopolítica y los retos financieros de la transición energética.
Para 2024, se prevé que los precios del cobre se mantengan altos debido a la demanda sostenida y la limitada oferta, exacerbada por recientes desarrollos como el cierre de la mina Cobre Panamá y la disminución de producción en compañías como Anglo American y Codelco. A pesar de estas perspectivas positivas, la inversión en el sector ha sido moderada, influenciada por factores como el aumento del nacionalismo en los recursos naturales y los crecientes conflictos ambientales y comunitarios.
La innovación tecnológica, incluyendo avances en automatización, inteligencia artificial y realidad virtual, juega un rol crucial en mejorar la eficiencia, reducir costos y aumentar la seguridad en la minería. Sin embargo, es necesario incrementar la visibilidad de estos esfuerzos. La sostenibilidad ambiental y social se ha convertido en una prioridad para inversores, comunidades y gobiernos, llevando a las empresas mineras a enfrentar presiones crecientes para mejorar en aspectos ESG, abordando temas como el cambio climático y el impacto social de sus operaciones.
La inestabilidad geopolítica sigue siendo un desafío, especialmente en regiones de alto riesgo. Se espera que conflictos como la guerra en Ucrania y las tensiones en Oriente Medio continúen impactando los mercados globales. En Chile, la incertidumbre regulatoria parece disminuir, pero la creciente influencia del crimen organizado en América Latina introduce una nueva variable de incertidumbre. Jurisdicciones mineras como África buscan atraer inversores, ofreciendo alternativas a América Latina.
El 2024 es un año crítico para las empresas mineras estatales chilenas, enfrentando complejidades y necesitando estrategias de viabilidad a largo plazo. Los cambios en el mercado del cobre, acelerados por el cierre de fundiciones clave, y los esfuerzos para desbloquear la explotación de litio en Chile, destacan entre los desafíos principales.
Se espera que en 2024 avance la iniciativa para agilizar la normativa en permisos mineros, un paso crucial dadas las características de la industria y su sensibilidad a la regulación excesiva.
En resumen, el año 2024 presenta un panorama diverso para el sector minero, lleno de oportunidades significativas, pero también de desafíos considerables. Será esencial que las empresas mineras continúen invirtiendo en innovación y sostenibilidad, y que los gobiernos implementen políticas que fomenten la inversión y una gobernanza responsable del sector. (Fuente: Corporación Alta Ley)