Marcos Lima: “La minería ganó una batalla importante en la Convención Constitucional”

• El académico de la Universidad Católica y expresidente ejecutivo de Codelco dijo que, “Las posiciones extremas que impulsaba la Comisión de Medio Ambiente fueron derrotadas y, por consiguiente, salvo algunas normas generales, la actividad quedará sujeta a una legislación que estará por dictarse”.

Marcos Lima es un referente en el mundo minero no sólo por haber presidido Codelco, sino también por su condición de académico e investigador de la Pontificia Universidad Católica, donde ejerce como profesor titular adjunto del Departamento de Ingeniería de Minas de esa casa de estudios superiores.

Estudió Ingeniería Civil de Industrias con mención en química en la Universidad Católica de Chile, fue director nacional del Instituto de Normalización Previsional (INP) entre 1990 y 1994, vicepresidente de administración y finanzas de Codelco-Chile entre 1994 y 1996, y presidente ejecutivo de la misma empresa entre 1996 y 2000. Además de sus funciones en el sector público, se ha desempeñado como consultor de diversas empresas y proyectos a través de CIS Consultores. En 2000 fue designado por el Copper Club, con sede en Nueva York, como The Copper Man of the Year, haciéndose merecedor al premio ANKH por su contribución a la industria mundial del metal rojo.

Es frecuente leer columnas de su autoría y entrevistas donde se refiere al acontecer minero. A propósito de la discusión del royalty, ha liderado un ciclo de charlas sobre la minería como motor de desarrollo de Chile.

En entrevista con Boletín Minero, Lima analiza el trabajo de la Convención y al referirse al borrador de la nueva Constitución echa de menos una mayor referencia a la minería.  “Si comparamos la legislación actual que rige la actividad minera, que viene en parte de la Constitución de 1925, ésta pierde certeza jurídica al dejar de regirse por leyes de quorum calificado”, sostiene.

BORRADOR DE LA NUEVA CONSTITUCIÓN

¿A su juicio, en qué situación quedó la minería en el borrador de la nueva Constitución?

La minería ganó una batalla importante. Las normas que impulsaba la Comisión de Medio Ambiente: la nacionalizacion, prohibir la participación del sector privado en el litio y “tierras raras”, acabar con las concesiones en sede judicial y otras propuestas, fueron rechazadas por el Pleno de la Convención Constituyente. Las posiciones extremas fueron derrotadas y, por consiguiente, salvo algunas normas generales, la actividad quedará sujeta a una legislación que estará por dictarse.

Según algunos, el borrador ha optado porque exista la minería privada y pública, lo que daría cierta tranquilidad. Sin embargo, otros, como SONAMI, piensan que ha quedado en el limbo y sujeta a leyes de simple mayoría. ¿Cuál es su opinión?

Por supuesto que, si comparamos la legislación actual que rige la actividad minera, que viene en parte de la Constitución de 1925, ésta pierde certeza jurídica al dejar de regirse por leyes de quorum calificado. No es algo baladí en una actividad que requiere de inversiones cuantiosas y de muy largo plazo, donde la estabilidad de las reglas del juego es indispensable.

¿Cree usted que la incertidumbre para el sector se mantiene?

Cuando hablamos del sindrome de Montreal, haciendo referencia al efecto demoledor que sobre las actividades económicas del sector francófono de Canadá tuvieron los impulsos separatistas, a pesar de que estos fueron derrotados ya dos veces, estamos pensando que algo similar puede ocurrir en Chile. Fue la incertidumbre y no la aprobación de determinada legislación lo que provocó el daño.

El gran crecimento que experimentó Chile en la inversión extranjera directa en los años noventa – que le permitió avanzar hasta llegar a ser el primer país de América Latina- no se explica sin las reglas del juego y su estabilidad (Codigo Minero, DL600, expropiaciones con pago a valor de mercado, etc.). Derogarlas y/o debilitarlas es un error que nos puede costar caro.

EL FUTURO DE CODELCO

¿Cómo queda Codelco en el borrador de la Constitución? No hay ningún artículo que haga referencia.

Por ahora, Codelco sigue contando con el apoyo de sus dueños, todos los chilenos, que por una amplia mayoría desean que siga siendo estatal. Considerando la práctica minera en el mundo, es algo exótico que aparezca en la Constitución lo que debe o no hacerse con la propiedad de una empresa.

El que se haya incluido en las normas transitorias la nacionalización de la gran minería es algo que puede generar aún más ruido. ¿Cree factible que se pueda incorporar al texto constitucional?

No lo creo. Si el Pleno rechazó varias veces estas ideas, sería muy extraño que las aprobara en las normas transitorias. No obstante, ello demuestra la tozudez de un sector de convencionales, que más que elaborar una buena Constitución para Chile, pretenden imponer sus visiones.

¿A su juicio, qué se puede desprender del hecho que la minería haya quedado prácticamente excluida del borrador, siendo uno de los sectores productivos más importantes del país?

Entre los convencionales y sus asesores (especialmente los más jóvenes) primó una imagen muy negativa de la minería. También mucho desconocimiento de sus actividades, de su importancia, de su desarrollo tecnológico, en fin, se quedaron en la caricatura “extractivista”, sin entender el real valor de la actividad minera.

Esta situación es un llamado de atención a todos quiénes tenemos voz en la minería (empresas, academia e instituciones del Estado) que no hemos sido capaces de mostrar los logros de nuestro sector, como motor del desarrollo de Chile.

EVALUACIÓN DE CONSTITUYENTES

¿En términos generales, cómo evalúa usted el trabajo de la Convención y, en particular, el de la Comisión de Medio Ambiente?

No era una tarea fácil redactar una Constitución en tan poco tiempo, con una diversidad de grupos tratando de imponer su particular visión. Que hayan llegado a algo aprobado por dos tercios es un mérito en sí. Estoy a la espera del texto definitivo para opinar. En cuanto al trabajo de la Comisión, el Pleno se pronunció en contra de la mayoría de sus propuestas varias veces, por lo que deduzco que no tuvieron mucho éxito.

¿Cree usted que en la mencionada comisión primó el sesgo ideológico y la incapacidad de llegar a acuerdos?

Lo que resultó fue bastante pobre. En una columna de opinion sobre sus proposiciones (que después fueron rechazadas), hice referencia a tres velos que nublan la razón: la ignorancia, la ideología y la soberbia.

¿Cómo ve el proceso de aplicar un royalty a la minería? El gobierno inició un proceso de diálogos sociales.

Veo difícil que con estos precios y la situación financiera del país no se instale la idea de un royalty mayor. Estuve en contra del royalty el 2003, ya que siempre ha pensado que la no discriminación entre sectores productivos tuvo éxito en Chile. Que es un recurso no renovable, ello es obvio, pero hoy tenemos mas reservas que hace treinta años, a pesar de que hemos exportado ciento cincuenta millones de toneladas. Son incentivos los que definen comportamientos (inversiones) y aun nadie me convence que esos impuestos adicionales no influyeron para que sigamos en las mismas 5,3-5,5 millones de tons de produccion desde la instalación del royalty, casi veinte años atrás.

¿Usted cree que es mejor un royalty ad valorem o aplicar un aumento al actual impuesto?

Si se aplica ad valorem, agregaremos un problema adicional frenando la producción de minas con mayores costos. No entiendo como no ven algo tan evidente.

¿Cree usted que en el actual escenario las inversiones mineras seguirán llegando a Chile?

No sé. Pero que en las casas matrices de las grandes mineras se está diciendo “Chile cambió” … evaluemos opciones, ello es seguro. No por nada nos contactaron de Uzbequistan para asesorarlos en su desarrollo minero y, en The Economist de la semana pasada, Zambia anuncia que pretende pasar de producir 800.000 tons a 3 millones.

Es una gran desgracia que la oportunidad histórica -aprovechar el hambre de cobre del planeta para neutralizar el cambio climático- nos haya encontrado tan divididos, tan enojados, tan perdidos.

(Boletín Minero. Editado para www,guiaminera.cl)