- Por Ricardo Manzur E. Director Aconcagua Factoring
En los últimos años hemos vivido situaciones complejas, tanto por la pandemia que nos ha afectado, como por los conflictos sociales y otros aspectos exógenos que han incidido en los negocios a toda escala.
Hoy, y particularmente en nuestra región, los países están realizando sendos esfuerzos por recomponer la economía con medidas sociales y económicas que esperan sean positivas. Sin embargo, también estamos a expensas de una inflación con consecuencias importantes.
Es por ello la importancia de algunas herramientas que existen en el mercado, como la que ofrece Aconcagua Factoring, las que entregan liquidez a las empresas para continuar con su desarrollo en los diversos mercados en los que se encuentran insertas.
El Factoring es una alternativa de financiamiento que se orienta de preferencia a pequeñas y medianas empresas y consiste en un contrato mediante el cual una empresa traspasa el servicio de cobranza futura de los créditos y facturas existentes a su favor y a cambio obtiene de manera inmediata el dinero a que esas operaciones se refiere, con tasas realmente competitivas.
Es importante comentar que está normado por la Ley 19.983 promulgada en abril de 2005 (y modificada posteriormente en varias ocasiones) que da legalidad a estas herramientas para su operación, al delimitar de manera más clara las obligaciones que tienen quienes dan y reciben una factura de venta y a quienes como las empresas de factoring, trabajan como intermediarios de éstas.
Por ello, considero trascendente informar en estas líneas sobre estos servicios, ya que esto les permitirá continuar con su negocio sin endeudarse y con la liquidez que se requiere, lo que redunda en mantener empleos, continuar con la actividad y seguir vigente en el mercado.
