El cambio climático es uno de los mayores desafíos que enfrenta actualmente la humanidad. La comunidad científica atribuye este cambio al calentamiento global que está generando el aumento en la atmósfera de gases de efecto invernadero (GEI) como el dióxido de carbono, el metano y otros compuestos halogenados. Lo señalado se presenta en un contexto de aumento exponencial de la población mundial, y se está manifestando en fenómenos meteorológicos extremos, con consecuencias como el derretimiento de glaciares, aluviones, inundaciones costeras y modificación de ecosistemas.
De esta manera, para enfrentar el cambio climático constituye un desafío para la ingeniería diseñar proyectos que sean sostenibles considerando este nuevo escenario, para lo cual se deben incorporar acciones de mitigación y adaptación. En un reciente informe de la UNESCO (“Engineering for Sustainable Development”), se destaca lo crucial que es la ingeniería para el desarrollo sostenible, y por qué el papel de los ingenieros es vital para atender necesidades humanas básicas como la mitigación de la pobreza, el suministro de agua potable y energía, la respuesta a los peligros naturales, la construcción de infraestructuras resilientes y la reducción de las brechas de desarrollo, entre otras acciones.
Nuestro país puede jugar un rol relevante para enfrentar el cambio climático, con la producción de materias primas que minimiza la necesidad de usar combustibles fósiles, y por lo tanto la emisión de GEI. Chile es líder mundial en la producción de cobre y litio, elementos vitales utilizados en la infraestructura para la generación de energía renovable no convencional (ERNC), así como en el desarrollo de la electromovilidad. A lo anterior se pueden agregar los auspiciosos resultados de investigación sobre el uso de hidrógeno verde como combustible para sustituir diésel. Dado que para la producción de hidrógeno verde es ventajoso contar con centrales de ERNC, y Chile cuenta con un gran potencial en este tipo de energías, el país está en una sólida posición para ser uno de los productores más eficientes y competitivos en el mundo de este tipo de combustible.
La comprensión y gestión de los riesgos del cambio climático, en un potente incentivo para las acciones de mitigación y adaptación que deben incorporar los ingenieros en sus diferentes roles de investigación o gestor de proyectos, tanto para infraestructuras existentes como futuras. En todos estos roles debe primar un fuerte compromiso con los diseños sustentables, la innovación y la incorporación de nuevas tecnologías.
