Inacap apuesta por mayor vinculación con los distintos sectores productivos

•  Lucas Palacios, rector de Inacap suscribió un convenio de “Fortalecimiento de capital humano en minería” con el ministerio de Minería, Enami, Sernageomin y SONAMI, que permitirá brindar oportunidades de formación y desarrollo continuo a los trabajadores de la pequeña minería y así abordar una de las necesidades más urgentes de este sector productivo.

Como parte de su mayor vinculación con los distintos sectores productivos, recientemente Inacap suscribió un convenio de “Fortalecimiento de capital humano en minería” con el ministerio de Minería, Enami, Sernageomin y SONAMI, que permitirá brindar oportunidades de formación y desarrollo continuo a los trabajadores de la pequeña minería y así abordar una de las necesidades más urgentes de este sector productivo. En entrevista con Boletín Minero, el rector de Inacap, Lucas Palacios, resalta la suscripción de este convenio.

“Nosotros tenemos puesta nuestra estrategia en ir formando técnicos-profesionales que puedan incorporarse en empresas de distinto tamaño, por eso es tan importante que SONAMI tenga una vinculación muy estrecha con Inacap, porque nosotros podemos formar a personas que después se van a sumar -hombres y mujeres- a las empresas que forman parte de la minería”, afirma el directivo.

Al analizar la situación de Inacap, el rector y exministro de Economía pone de relieve la labor de los Consejos Territoriales y los Consejos Empresariales Sectoriales formados al alero de Inacap, “de manera que estos permitan aumentar la vinculación entre el sector formativo técnico profesional y el mundo del trabajo en las distintas regiones del país”.

VINCULACIÓN CON EL MUNDO EMPRESARIAL

¿Cuál es la vinculación que tiene Inacap con el mundo empresarial, especialmente con la CPC?

Para nosotros lo más importante es que nuestros estudiantes tengan la posibilidad de desarrollarse a futuro, es decir que puedan encontrar un buen empleo una vez que egresan y se titulan. Para eso es fundamental que todas nuestras carreras sean pertinentes a cada una de las regiones en donde se dictan y,  para ello, tenemos una muy cercana relación con los distintos grupos económicos, con las distintas industrias que están en cada una de las regiones donde tenemos sedes. Esa es la razón por la cual nuestra oferta educativa en las distintas regiones no es la misma, sino que responde a la realidad propia de cada región. Adicionalmente, Inacap es una corporación de derecho privado sin fines de lucro cuyo gobierno corporativo está compuesto por siete personas, 6 de las cuales son nombradas por cada una de las ramas que componen la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y el séptimo lo nombra el gobierno a través de Sercotec. Es muy bueno que exista una institución educativa, como Inacap, que está desplegada desde Punta Arenas hasta Arica y que tenga una íntima relación con las distintas industrias para que la oferta educativa sea pertinente, porque de esa forma podremos generar una mayor descentralización productiva, una mayor movilidad social y una mayor productividad para el país.

¿A qué apunta esa estrategia educativa?

Hemos ido depurando nuestra estrategia para ser cada día más pertinentes en un contexto en donde hay cambios muy profundos y acelerados desde el punto de vista tecnológico y de la innovación productiva. Tenemos un sistema que hemos llamado de Prospección Laboral a través del cual proyectamos cuáles son las necesidades de capital humano en cada una de las regiones. Este es un trabajo donde cruzamos información estadística con información respecto a las inversiones que se llevan a cabo en las regiones y lo complementamos con información cualitativa a través de Consejos Territoriales que hemos conformado junto a la CPC. Tenemos en todo el país 18 Consejos Territoriales y, además, tenemos Consejos Empresariales Sectoriales, uno de ellos en Minería, que buscan levantar cuáles son las particularidades de cada una de las industrias y las necesidades que tienen de acuerdo a los avances tecnológicos de competitividad o innovaciones productivas.

ACREDITACIÓN DE EXCELENCIA MÁXIMA

¿Por qué decidieron focalizar su quehacer en el mundo técnico profesional y no en el universitario?

Inacap tiene 57 años de existencia. Ha evolucionado en el tiempo. Ha ido adaptándose a las necesidades del país. Inacap se debe a Chile y durante un tiempo efectivamente incursionamos y llegó a tener una universidad bastante grande, pero luego el Consejo Directivo tomó una decisión, muy acertada, en el tiempo en que Alberto Salas era el presidente. En esa oportunidad, se tomó la decisión de focalizar el quehacer de Inacap directamente al ámbito técnico-profesional, porque es la necesidad que productivamente tiene el país. Esa es la razón por la cual se tomó la decisión de hacer un cierre voluntario y programado de la universidad y poner el foco directamente en el subsistema técnico-profesional.

¿Por qué cree usted que fue un acierto?

Porque pese a que la educación superior tiene dos grandes subsistemas, el universitario y el técnico-profesional, el tipo de enseñanza difiere mucho entre uno y otro. La educación técnica es la que ha ido creciendo en países desarrollados a la par de los cambios tecnológicos y exigen de más técnicos mejor preparados, por lo tanto, lo que vamos a ver de aquí al futuro es una necesidad cada vez mayor de técnicos y técnicos-profesionales que, además, se van a ir formando a lo largo de la vida producto de estos cambios que se están acelerando y profundizando en la sociedad día a día. Esa es la tendencia de los países desarrollados y esa es la tendencia que también debiera seguir nuestro país.

¿Cree usted que la educación chilena está conectando con esa tendencia?

Chile es un país de muchos prejuicios y de muchos paradigmas que culturalmente cuesta derribar. Uno de ellos es que se fue instalando en nuestro país, la idea de que para que un joven sea exitoso, debía tener un título universitario y esa realidad va invisibilizando la necesidad y la importancia que tiene la educación técnico-profesional, pero eso está cambiando. Desde ya hace 15 años el crecimiento de alumnos de primer año es mayor en la educación técnico-profesional que en el sistema universitario.

Se ha ido produciendo un cambio poco a poco, pero creo que aún falta mucho y es objetivo de toda la sociedad ir reposicionando la educación técnico-profesional, que es lo que el país necesita y, además, es la educación que mayor movilidad educativa y social genera.

¿Cuál es la realidad hoy de INACAP en términos de alumnos y sedes?

En el sistema técnico-profesional hay un nivel de concentración bastante alto a nivel de país. Cuando uno ingresa a cada una de las regiones, observa mayor cantidad de instituciones, muchas de ellas que sólo tienen sede en una o un par de regiones, pero a nivel país existen 4 instituciones que son las que agrupan el mayor nivel de matrícula de la educación técnico-profesional: Inacap, Duoc, Aiep y Santo Tomás.

INACAP está presente en las 16 regiones de Chile, por medio de 28 Sedes, más una sede online y nuestra sede central. En la actualidad, nuestras instituciones, tanto el Instituto Profesional como el Centro de Formación Técnica, cuentan con 7 años de excelencia, y más de 106.000 estudiantes han confiado en nosotros para estudiar y sacar adelante sus sueños.

Uno de nuestros sellos es el Aprender Haciendo, es decir, los estudiantes desde un primer momento aprenden en contextos reales, en talleres y laboratorios modernos, donde el aprendizaje es entretenido y muy vinculado a la realidad que se vive en las empresas.

SIGNIFICATIVO CRECIMIENTO DE LA MATRÍCULA

¿Cómo evalúan ese mayor crecimiento en la matrícula?

Nosotros el año pasado nos preparamos mucho para la acreditación del Instituto Profesional Inacap y obtuvimos la acreditación de excelencia máxima, que son 7 años. A partir de la nueva ley de educación superior, somos la sexta institución en Chile de las más de 110 que hay en el país en obtener esta acreditación de excelencia máxima. Nos anteceden la Universidad de Chile, la Universidad Católica, la Universidad de Concepción, la Universidad Católica de Valparaíso, la Universidad de Santiago y el Instituto Profesional Inacap. Estas son las únicas instituciones de educación que tienen la excelencia máxima de 7 años. Esto nos permite demostrar que estamos en un nivel de excelencia y somos la única institución del ámbito técnico-profesional que ha logrado, con esa nueva ley, la máxima certificación. Eso, en conjunto con una estrategia de fuerte vinculación con los sectores productivos y las empresas, que se despliegan en cada una de las regiones de nuestro país, nos permitió obtener una matrícula de más de 106.000 estudiantes este 2024, en donde tuvimos que dejar a muchos estudiantes en lista de espera, porque al estar adscritos a gratuidad tenemos un crecimiento máximo definido por ley. Podríamos haber crecido mucho más.

¿Qué explica este buen resultado para Inacap?

Creo que ha sido un trabajo puesto en el estudiante y en la pertinencia que tiene nuestra educación de beneficiar al crecimiento y productividad del país, porque eso nos permite que nuestros estudiantes sean bien valorados y mantengamos un nivel de empleabilidad cercano al 90%, que es muy alto dentro del sistema de educación superior. Además, esa pertinencia nos permite que nuestros estudiantes, cuando se titulan, el 85% de ellos en promedio se quedan trabajando en la región donde estudió. Eso habla de nuestro compromiso con la descentralización productiva, es decir, nosotros desde cada una de nuestras 30 sedes no estamos dictando los programas que nosotros creemos que vale la pena ofrecer, sino que nosotros trabajamos esto con distintos sectores productivos de acuerdo a la vocación productiva que tiene cada región.

Recientemente suscribieron un convenio con SONAMI, ¿Cómo se está relacionando con la industria minera?

Una economía sana funciona bien con empresas de distinto tamaño. Cuando empresas de distinto tamaño tienen la posibilidad de sumar personal capacitado es cuando las empresas más pequeñas pueden ir creciendo y transformándose en medianas y, eventualmente, una mediana puede transformarse en una grande. Nosotros tenemos puesta nuestra estrategia en ir formando técnicos y técnicos-profesionales que pueden incorporarse en empresas de distinto tamaño, por eso es tan importante que SONAMI tenga una vinculación muy estrecha con Inacap, porque nosotros podemos formar a personas que después se van a sumar a las empresas que forman parte de la minería. Nos interesa mucho que la pequeña y mediana minería tenga acceso a excelente capital humano, porque Chile es un país minero y si los objetivos del planeta van hacia la incorporación de la electromovilidad y la descarbonización la respuesta es la minería. Entonces, es importante formar a los hombres y mujeres que se van a incorporar en el presente y en el futuro en esta importante actividad productiva, concluye el rector de Inacap, Lucas Palacios.