- Por Luis Castillo Barrera, Country Manager Aconcagua Factoring-Chile
Las pequeñas y medianas empresas conforman parte en motor de desarrollo del país, tanto por su aporte a la economía nacional como por la cantidad de empleos que generan, entre otros.
Sin embargo, ante las complejidades de la pandemia y sus consecuencias sanitarias y financieras muchas de ellas han entrado en insolvencia o, bien, en complejidades para cumplir con sus compromisos financieros. Para ello, Aconcagua Factoring ofrece un servicio a la medida de cada una de ellas, sin requerir de endeudamiento.
El factoring presenta una serie de ventajas para los negocios. La primera de ellas es la liquidez inmediata. Con el factoring, las facturas se pueden cobrar en el mismo momento en el que se emiten. No generan deudas, porque es un intercambio de derechos de cobro entre la empresa cedente y el banco. Con ello, si la empresa necesita solicitar un préstamo puntualmente, podrá hacerlo y habrá conseguido la liquidez suficiente sin endeudarse.
En tiempos complejos, es importante evitar los préstamos, por ello, con el factoring financiero se externaliza la gestión del cobro. Esto hace que la empresa no destine ningún recurso a este tipo de operaciones.
Por ello, Finalmente, parte de nuestra misión es entregar un asesoramiento financiero y comercial, ya que nos interesa que su negocio permanezca en el tiempo, pero también esperamos que puedan crecer y contar con los recursos necesarios para un desarrollo sostenible del negocio.
Según información pública, el mayor problema que enfrentan las pequeñas y medianas empresas es el bajo acceso al crédito, por ello esta herramienta, validada en el sistema, es un alternativa viable y segura para ellos. Obtienen liquidez de manera casi inmediata; no se genera deuda para la empresa solicitante; se externaliza la gestión de las facturas y cuentan con asesoramiento financiero y comercial.
