El Abra evalúa extensión de su vida útil hasta 2054, si se concreta su expansión

• Este año se inició el desarrollo de algunas de las Líneas de Base necesarias para la elaboración de un Estudio de Impacto Ambiental. Asimismo, se retomó la construcción de la Fase II del proyecto Sulfolix.

Minera El Abra está evaluando la extensión de su vida útil, más allá del 2029, lo que contemplaría el reemplazo del proceso productivo actual de lixiviación por el de concentración de sulfuros de cobre. Si se concreta el proyecto, la vida útil de la mina se extendería a 2054 o más, según proyecciones vigentes.

El proyecto en evaluación consiste en la ampliación del yacimiento existente en explotación, para exponer las reservas de minerales de sulfuros de cobre existentes. Para esto se necesita construir una Planta Concentradora, en la que se procesarán los sulfuros primarios de cobre, un depósito de relaves espesados y las obras de infraestructura de suministro de agua de procesos, transmisión de energía eléctrica, telecomunicaciones, caminos y servicios.

La operación existente tiene una capacidad máxima de producción de 225 mil toneladas métricas de cátodos de cobre al año. Este nuevo proyecto permitirá producir alrededor de 315 mil toneladas métricas adicionales de cobre fino por año y 9 millones de libras de molibdeno.

EL PROYECTO SULFOLIX

A mediados de 2018 se completó la actualización de un estudio de prefactibilidad de ingeniería que había sido suspendido el año 2013. La actualización permitió identificar oportunidades de mejora de algunas obras relevantes del proyecto que se están estudiando para demostrar su viabilidad técnica y económica. Aunque se lograron importantes avances durante el 2019, los estudios técnicos, sociales y ambientales del proyecto se suspendieron a finales del primer trimestre de 2020 debido a condiciones económicas y del mercado, así como por restricciones surgidas de la pandemia.

En 2021 se retomó el trabajo, con el desarrollo de algunas de las Líneas de Base necesarias para la elaboración de un Estudio de Impacto Ambiental. Asimismo, se retomó la construcción de la Fase II del proyecto Sulfolix.

El futuro de El Abra requiere la extensión de la vida útil de Sulfolix para que pueda operar hasta 2035, de manera de hacer una transición entre la actual operación de El Abra y el Proyecto Concentradora, que tendrá una capacidad promedio de procesamiento de 270 mil toneladas métricas por día (tpd) .

Las obras que se requieren realizar son la construcción de 12 nuevas celdas de lixiviación, que se dispondrán en una pila con máximo 80 metros de altura y se construirá al lado de la pila de la Fase I.

El agua requerida para el procesamiento de minerales en la Planta Concentradora será 100% agua de mar desalinizada, la cual se obtendrá mediante una planta desaladora que se ubicará al sur de Tocopilla. Para las operaciones de la Mina se evalúa continuar usando parte de los derechos de agua del Salar de Ascotán ya existentes. Con ese propósito, se está desarrollando el levantamiento de líneas base medioambientales con la participación de las comunidades relacionadas con el Salar.

EVALUACIÓN AMBIENTAL

Actualmente la empresa se encuentra elaborando el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) que permitirá acreditar el cumplimiento de la normativa y presentar el proyecto a evaluación de impacto ambiental durante 2022.

Es importante considerar que como los estudios de ingeniería no están aún finalizados, se está definiendo un caso base para la ubicación de las principales obras del proyecto. Esto permitió identificar las áreas de influencia del proyecto y definir los polígonos de levantamiento ambiental correspondientes.

El proyecto una vez concluido permitirá obtener una producción de 690 millones de libras de cobre fino por año y 9 millones de libras de molibdeno por año.

Principales obras del proyecto

Sustentabilidad del proyecto

1. Eficiencia en el uso de los recursos energéticos

• Correa transportadora de más de 25 km de longitud que genera energía eléctrica para el proceso
• Uso de tecnología de última generación en el chancado fino con ahorro significativo de energía durante el proceso.
• El Proyecto se abastecerá con energías 100% renovables.

Eficiencia en el uso de los recursos hídricos

• Uso de agua de mar desalinizada en el proceso de concentración en lugar de agua de acuíferos de alta montaña.
• Menor consumo de agua fresca por mayor reciclaje de aguas del proceso de concentración de minerales al usar tecnología de relaves espesados.

Gestión social

•  Información, consulta y participación de las comunidades en todas las etapas del proyecto.
• Fortalecimiento de las condiciones económicas locales.
• Generación de nuevas oportunidades de empleo en las distintas etapas del proyecto.
• Programas de capacitación

(Fuente: El Abra)

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