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Negociaciones colectivas: Productividad y Competitividad en la balanza
- Por Alvaro Merino Lacoste, director ejecutivo de Núcleo Minero.
Las negociaciones colectivas son uno de los grandes logros de los trabajadores en el mundo laboral. También, lo son para las empresas. Facilitan el diálogo entre las partes y, además, si no se llega a acuerdo, hay instancias como las mediaciones de los organismos del Estado establecidos para este fin.
Las negociaciones colectivas están insertas en nuestra normativa laboral y en la relación entre empresas y sus respectivos sindicatos, de modo tal que no debiera llamar la atención el que se realicen. Lo que sí asombra son los montos millonarios con los que se han cerrado las últimas negociaciones en la minería, particularmente, en Minera Escondida y en Codelco División El Teniente, principales yacimientos mineros de Chile y del planeta, a rajo abierto y subterráneo, respectivamente.
El bono de $22,5 millones por término de conflicto en El Teniente y el de $ 33 millones en La Escondida, sin duda, abren altas expectativas en sindicatos de otras compañías mineras, porque son un referente para sus futuros procesos de negociación.
Sin embargo, se debe tener presente que en estos procesos se debe considerar la realidad propia de cada compañía minera, la que naturalmente es diferente entre las diversas empresas y determinan la productividad de cada operación. La ley del mineral de cada yacimiento, las condiciones geológicas que lo caracterizan, si la operación es subterránea o a rajo abierto, el nivel de producción, etc. son, todos factores determinantes en la productividad.
Y, es justamente esto, lo que debe determinar el nivel de beneficios en los procesos de negociación colectiva. Si los beneficios exceden con creces el nivel de productividad, en el largo plazo esa compañía minera perderá competitividad y no será sostenible en el tiempo, de modo tal que se debe actuar con cautela y con alta dosis de realidad en cualquier negociación.
En términos generales, preocupa el incremento de costos que se ha observado en el último año. En efecto, de acuerdo a Cochilco, entre el año 2022 y 2023, el costo directo de las compañías mineras en Chile se incrementó en 25,3 centavos de dólar por libra, pasando de 166,8 ¢US$/lb a 192,1¢US$/lb, esto es, un aumento de 15%., mientras que el precio del cobre disminuyó 3,6%. Cabe destacar que, de ese incremento, 8 centavos se explican por el ítem remuneraciones.
Es de esperar que los futuros procesos sectoriales se desarrollen por los cauces normales establecidos para estos efectos, los que naturalmente deben estar centrados en la realidad, considerando por cierto la sustentabilidad, esto es, la situación actual de la compañía minera como también el comportamiento futuro de cada faena.
Tenemos una fuerza laboral madura, de modo tal que, ojalá en estos procedimientos primen el dialogo, los buenos oficios y los acuerdos realistas, en un momento en que es necesario incrementar la producción minera del país y aumentar nuestra competitividad.